miércoles, 13 de agosto de 2014

A la mar







CONCEJALÍA DE PARTICIPACIÓN CIUDADANA
José Guerrero, ganador del I Concurso Literario de Poesía “Rosario Navas”
La plaza de Andalucía de la Barriada de las Protegidas acogió el pasado sábado el I Concurso Literario de Poesía “Rosario Navas”, que organiza  la Asociación de Vecinos de Las Protegidas, con la colaboración de la concejalía de Participación Ciudadana de Nerja.
Al certamen se presentaron un total de 11 concursantes, resultando ganador José Guerrero Ruiz, con la obra titulada “A la mar”.  También se entregaron dos accésits, un para Plácido Acosta Iranzo por “Caro Amor”, y otro para Juan Jiménez, que presentó una obra sin título.
El jurado estaba formado por María Isabel Jurado Márquez, Ana María Durán Jiménez, Damián Bueno Fernández y Lucía Muñoz Arrabal.

En el acto de entrega de premios participaron la concejala de Participación Ciudadana, Sandra Jimena; el alcalde pedáneo de Las Protegidas, José Miguel Ortuño, y miembros de la Asociación de Vecinos.



              A LA MAR
Hembra marina que amamantas 
Con tus pechos de espuma
A los innumerables pobladores
Que residen en tus aposentos,
Tanto en lóbregos acantilados
Como en soleados regazos de calma chicha.
Oh mar de amores, que te acicalas
Y atusas los azules bucles
Asentada en verdinegros tronos vitalicios
Siguiendo las veleidades de Selene
Entre mar de fondo y mareas
Por los más salados subterfugios,
Y ofreces con altruista empeño
Las más deliciosas ambrosías,
Bocados de cielo arrancados de tus entrañas 
Por la industria pesquera
Con insensible bizarría.
Oh mar de tesoros, eres la mar de buena;
Sin embargo, cuando agitas tus crines plateadas
Te tornas fiero, amenazante, retador,
Y enmascarado tras carnavalescos velos
Te subes a las barbas de las embarcaciones
O te zambulles, cual furtivo polizón,
En los abismos escurriendo el bulto,
Huyendo de los destellos del claro día y
De la dulce luna, sorteando riesgos y riscos sin cuento,
Cortejando o violentando a nautas sin pericia
Que surcan las turbulentas autopistas
O las corrientes asesinas del Golfo.
La bonancible madre mar
Y el cejijunto mar padre,
Hembra, macho, muerte, vida,
Dos antagónicos mares que cohabitan en
Una paz belicosa entre Escila y Caribdis,
En el mismo rebalaje,
En la misma balanza que conforma
El cosmos hidrológico.
Y los ávidos marengos se hacen a la mar
Moviéndose por su hábitat como pez en el agua,
Y, cual sísifos marinos, forcejean
Y extraen con industrioso afán
Las nutrientes excelencias
Que la próvida mar engendra
Para disfrute humano en opíparos banquetes

En el convulso mar de la vida.